Indignados: los límites del lumpen
Que los del 15-M tengan simpatizantes no me asombra, aunque se cuente entre ellos a los del 22-M de Barcelona –porque son exactamente la misma cosa–, visto el estado de la Nación.
Que los del 15-M tengan simpatizantes no me asombra, aunque se cuente entre ellos a los del 22-M de Barcelona –porque son exactamente la misma cosa–, visto el estado de la Nación.
Esperanza Aguirre propone ahora nada menos que volver al camino perdido, el de los ilustrados, y ofrecer a los jóvenes con vocación, capacidad, voluntad y disciplina intelectual la posibilidad de liberarse de los determinismos de su origen, de su barrio, de su clase, sirviéndose de la enseñanza pública para igualarse con los hijos de la burguesía que pueden pagarse los colegios de élite de imposible acceso para los humildes.
En España no ha habido ni hay teóricos de la nueva derecha. O como llamemos al invento. Debo dejar constancia de que he empleado los términos izquierda y derecha para que nos entendamos, pero son términos caducos, que tuvieron vida entre 1789 y 1989, exactamente dos siglos, y ya no significan nada, son sólo nombres.